Encontrar un hombre no le debería haber resultado muy difícil a una mujer tan bella como Lilibeth Anderson, pero estaba harta de los tipos de su ciudad. Quería encontrar a alguien y estaba empeñada en cazar al próximo que se presentara, sin importar quién fuera.
Entonces conoció a Alex, el nuevo director del colegio, entre cuyos planes no figuraba el amor. Pero ¿qué podía hacer un hombre cuando encontraba una rubia tan persuasiva que no aceptaba un no por respuesta?