MENSAJES DE FE POR SMITH WIGGLESWORTH
He sentido la urgente necesidad de traducir al español algunos de los escritos de hombres de Dios, que fueron altamente usados por Dios en épocas pasadas, y que nos pueden servir de estímulo para que también nosotros seamos imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas. No hay generación que no necesite de la generación que pasó. Cometemos un grave error, si buscando la última revelación, ignoramos el hecho de que no hay nada nuevo bajo el sol.
Algo que me inquieta es ver como esta generación que habla tanto de fe y poder, no parece que está avanzando lo suficiente para hacer las obras de Dios. ¡Que Dios nos libre de lo que yo llamo un “intelectualismo de fe” que carece de poder y de santidad! La prueba de la fe, no es en lo que se dice, sino en lo que se hace. Jesús preguntó si habría fe en la tierra cuando Él regrese a la tierra.
En este libro encontrarás a un hombre que sabía lo que era fe, y operó en ella, no para hacerse famoso ni para hacerse rico; sino para ayudar al enfermo y al cautivo. Lo que más me impacta de la vida y el ministerio de este hombre es la compasión que sentía por el impotente y el necesitado. Considero que en estos mensajes podemos descubrir el espíritu de Smith Wigglesworth. Por muchos años mi vida ha sido bendecida y nutrida con el ministerio de este hombre de Dios. Como sé que hay tan poco en español de este hombre, me di a la tarea de traducir estos mensajes mientras estaba en una jornada de ayuno de 21 días al principio del 2005.
Quiero darte algunas palabras de advertencia acerca de los mensajes que vas a leer. Aparentemente se ven sencillos, pero no lo son. Hay muchas joyas de revelación escondidas entre línea y línea. Recuerda que esto no es un libro, sino una colección de sermones. Smith Wigglesworth era un humilde plomero, a quien Dios llamó para usarlo sobrenaturalmente para su gloria. Su estilo de hablar el inglés es muy diferente y difícil de traducir. Tuve que decidir entre traducir con estilo o traducir su espíritu. Me decidí por lo último. Habrá expresiones que no te sonarán bien, pero eso fue exactamente lo que él dijo.
Tampoco uses este libro para establecer doctrinas. Wigglesworth no era un teólogo ni un maestro, él era un evangelista de sanidades y milagros. Recuerda que él vivió en la primera mitad del siglo 20. No puedo dejar de admirar el hecho de que estuviera tan adelantado en revelación de lo que es la fe y la vida en el Espíritu. Ese es el premio de un hombre que nunca leyó otro libro en su vida, y nunca permitía que entrara a su casa ni una copia del periódico.
Te garantizo que hay mucho que aprender de este general de la fe. Tu fe nunca será igual si lees con un corazón abierto.
En el amor de Cristo
Nahum Rosario
Traductor y Editor del libro.
Chicago, IL USA
Febrero de 2005