En la tesis "La Revolución Socialista y el derecho de las naciones a la autodeterminación", Lenin argumentó y defendió el derecho de las naciones a la autodeterminación, incluida la separación, y sostuvo una lucha inconciliable contra toda manifestación de nacionalismo burgués, por la unidad de acción de los proletarios de todas las naciones, por la igualdad de derechos, la cohesión y la amistad de los pueblos. Previó que solo el socialismo aseguraría la aproximación de las naciones sobre una base verdaderamente democrática e internacionalista y llevaría a la unión y la amistad de los pueblos libres y con derechos iguales.